Desde hace unos años varios polígonos de investigación chinos han estado desarrollando nuevas ideas que pueden derivar en éxito comercial. El 30 de octubre comenzó a funcionar un nuevo índice de valores para estas compañías orientadas a la innovación, ChiNext reúne a 28 empresas. Ese mismo día la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma del gobierno (NDRC) anunció que estaba creando unos 20 fondos financieros de capital de riesgo que podrían valorarse en unos 9 mil millones de renminbis (1,3 mil millones de dólares estadounidenses), una proporción significativa del capital de riesgo del país:
Ambas iniciativas han recibido respuestas diversas por parte de los empresarios.
ChiNext, parte de la bolsa de valores de Shenzhen (SZSE), en Senzhen, está siendo aclamada como la respuesta china al NASDAQ, mercado estadounidense considerado el hogar natural de los negocios de tecnología de punta. El día de apertura del ChiNext, las cotizaciones en el SZSE crecieron tan rápidamente que los reguladores se vieron forzados a suspender la actividad temiendo una inflación peligrosa.
“Chinext estimulará el establecimiento de compañías derivadas y provee un canal financiero efectivo para comercializar tecnologías”, dice Li Yang, director de proyecto del Centro Internacional de Transferencia de Tecnología en la Universidad de Tsinghua en Beijing, uno de los portafolios más fuertes de propiedad intelectual en China.
Lawrence Lau, economista y vicerrector de la Universidad China de Hong Kong, está de acuerdo en que ChiNext es un desarrollo positivo porque provee de una manera conveniente de hacer dinero emitiendo acciones en compañías chinas pequeñas, un canal que no existía previamente.
Una de las industrias de interés es la farmacéutica. Gregg Scott, fundador de la firma de consultoría ChinaBio, con sede en Shangai, apunta que cuatro de las cinco compañías farmacéuticas que cotizan en ChiNext están produciendo o planean producir nuevas drogas. Hasta ahora, dice, las compañías farmacéuticas chinas más prósperas se han enfocado en dispositivos médicos o en versiones genéricas de drogas existentes. “Ver tantas compañías innovadoras en el espacio de las drogas me sorprende”, agrega Scott.
Para China el desarrollo de esta industria es importante, pues como hogar de cerca del 20% de la población mundial, China soporta la mayor carga del mundo en cuanto a sanidad. A pesar del crecimiento económico que ha tenido hasta ahora, el país se sitúa solo en el sitio 92 de 182 países en el índice de Desarrollo Humano, una medida del desarrollo de la salud pública.
Fuentes:
ChiNext, parte de la bolsa de valores de Shenzhen (SZSE), en Senzhen, está siendo aclamada como la respuesta china al NASDAQ, mercado estadounidense considerado el hogar natural de los negocios de tecnología de punta. El día de apertura del ChiNext, las cotizaciones en el SZSE crecieron tan rápidamente que los reguladores se vieron forzados a suspender la actividad temiendo una inflación peligrosa.
“Chinext estimulará el establecimiento de compañías derivadas y provee un canal financiero efectivo para comercializar tecnologías”, dice Li Yang, director de proyecto del Centro Internacional de Transferencia de Tecnología en la Universidad de Tsinghua en Beijing, uno de los portafolios más fuertes de propiedad intelectual en China.
Lawrence Lau, economista y vicerrector de la Universidad China de Hong Kong, está de acuerdo en que ChiNext es un desarrollo positivo porque provee de una manera conveniente de hacer dinero emitiendo acciones en compañías chinas pequeñas, un canal que no existía previamente.
Una de las industrias de interés es la farmacéutica. Gregg Scott, fundador de la firma de consultoría ChinaBio, con sede en Shangai, apunta que cuatro de las cinco compañías farmacéuticas que cotizan en ChiNext están produciendo o planean producir nuevas drogas. Hasta ahora, dice, las compañías farmacéuticas chinas más prósperas se han enfocado en dispositivos médicos o en versiones genéricas de drogas existentes. “Ver tantas compañías innovadoras en el espacio de las drogas me sorprende”, agrega Scott.
Para China el desarrollo de esta industria es importante, pues como hogar de cerca del 20% de la población mundial, China soporta la mayor carga del mundo en cuanto a sanidad. A pesar del crecimiento económico que ha tenido hasta ahora, el país se sitúa solo en el sitio 92 de 182 países en el índice de Desarrollo Humano, una medida del desarrollo de la salud pública.
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